- Tocarle el timbre a su vecino fanático del fútbol cuando juega su equipo para pedir prestada cualquier cosa. En su defecto, tocar el timbre en cualquier casa en época de Mundial o Juegos Olímpicos cuando juega la selección (de fútbol, claro está) y pretender que te atiendan de buena manera.
- Suponiendo que no tenga Ud. la costumbre de limpiar muy seguido, encender la aspiradora (que hace un ruido infernal, obvio) a la hora de la siesta, cuando no sólo su vecino, sino también sus pequeños críos están durmiendo.
- Escuchar música abundante en solos de guitarra eléctrica y/o batería (por ejemplo, alguna banda metalera) a cualquier hora, pero especialmente cuando el vecindario está tranquilo, así su bardo tendrá más notoriedad.
- Escuchar cualquier género musical a cualquier hora a volúmenes insoportables, pero acompañarlo de graznidos de cuervo borracho que simulan ser un canto. En mi caso es Janis Joplin, o sea que con las versiones en vivo le doy a mi vecino abundantes razones para que me odie.
"Trouble in mind", Janis Joplin