3.1.09

El infierno está... tecnológico esta noche

Reproductores de mp3. Aparatejos infernales, destinados a complicarte la existencia. Y además, como todas las otras cosas catalogadas como "satánicas", no podés vivir sin él. O sí, pero tenés síndrome de abstinencia. Es que simplemente tiene tantas, pero tantas partes que es posible que se rompan/pierdan/dejen de funcionar, lo que lo convierte en un objeto odioso (como mínimo).
El cable usb siempre desaparece, pero es particularmente invisible cuando a tu reproductor le quedan 0,0000001 líneas de batería y tenés por delante un día muy largo.
También desaparecen los cargadores. O se rompen y justo se te había vencido la garantía. En el mejor de los casos. Porque puede pasarte que tu adminículo lo hayas comprado en un lugar poco respetable (somos muchos, relax), por lo que ese vocablo no existirá en el registro de los vendedores. Lo más probable es que ni siquiera los encuentres donde los dejaste. A los vendedores.
Y los auriculares. Eso es otra cosa. Se te va a romper siempre el del mismo lado. Y nunca, pero nunca, te van a durar más de seis meses. También es mentira que si te comprás unos más caros durarán más. Es todo una maniobra de los fabricantes. Y hay más. En realidad, esas cosas son anzuelos high-tech para la cartera de la dama y el bolsillo del caballero. Dama promedio, tu cartera es un quilombo, por lo que en el acto de sacar tu reproductor, dichos anzuelos arrastrarán a su paso casi cualquier cosa: lápices sueltos, papeles viejos y una larguísima lista de etcéteras que toda cartera femenina debe contener. En cuanto a ti, caballero, tus bolsillos son un asco, y tus auriculares te dejarán en evidencia, esparciendo boletos viejos, monedas de cinco centavos y otras cosas por ahí; y acusándote silenciosa pero efectivamente de sucio.
Esto se suma a lo que dijimos anteriormente, que nunca reproducen lo que de verdad querés escuchar. Esta situación se desarrolla: de una ligera molestia (que ocurre cuando tenés unas... 25 canciones), pasa a ser un engorro (de 25 a 50 canciones) y de allí a una cólera asesina (más de 50 canciones).
Pero si no lo uso me agarra la abstinencia...

1 comentario:

JuanM dijo...

Yo los odio porque no me duran funcionando correctamente más de tres meses.
La palanquita que cambia de canción es tan trucha que te da la sensación de que en cualquier momento se hunde dentro del aparato.

Mierdas Made in China